martes, 29 de mayo de 2012

Entre Carcaboso y Candelario, 150km de diversión.






Lunes de Romería en Coria y en mi agenda una propuesta tentadora de Antonio Manzano, tentadora por que en esta jornada se iban a ver cumplidos varios de mis propósitos o retos personales: como hacer más de 100km sobre la bici y recorrer el tramo de la Vía de la Plata que transcurre por nuestra zona.

Antonio bautizó la etapa como Ruta de los Pueblos Típicos, y su llamada sedujo a muchos de los componentes de nuestro grupo de BTT Xálima, pero al ser festivo solo en Coria, no todos los seducidos pudieron disfrutar de tan tentadora ofrenda.
La salida estaba prevista a primera hora de la mañana en Carcaboso, yo acudí desde Coria por el tramo de Vía de la Plata que va paralelo a la carretera de Aldehuela del Jerte, tenía interés por saber si pasarían peregrinos hacia Santiago, estaba convencido que me encontraría con los más madrugadores que hubieran hecho noche en Galisteo, lo que no me imaginé es que en el mes de mayo pasaran tantos peregrinos, aunque sin duda creo que es la mejor época, por que la dehesa extremeña en estas fechas, se muestra de lo más generosa para el deleite de los viajeros.

Una vez en el punto de partida me encuentro con Antonio, como siempre madrugador, esperamos a Raúl y a Serra tomando un cafecito en la Cervecería Izan, pongo el nombre por el maravilloso trato recibido a primera hora, con el obsequio de un trozo de bizcocho casero, y a la vuelta con unos generosos pinchos para acompañar nuestras merecidas cervezas con limón.
Una vez todos dispuestos partimos los cuatro sonrientes de Carcaboso en busca de la antigua Vía de la Plata, nuestros rostros manifestaban la alegría, ya estábamos sumergidos de lleno en el reto de Antonio,no sabíamos que nos deparaba la jornada, solo que unos 140km, según marcaba el trazado inicial, distaban de culminar nuestra particular experiencia.

Los colores del campo después de unas semanas de lluvia, el olor de las jaras y la tranquilad que ofrece un día de diario nos fueron atrapando poco a poco, cada uno de nosotros se fue cautivando por el maravilloso marco que nos envolvía, íbamos adelantando a peregrinos, nuestro ritmo se iba acelerando a la vez que nuestros sentimientos. Sin darnos cuenta, estábamos abandonando Extremadura por una de las Vías mas transitadas y antiguas de la época, paramos en Aldeanueva del Camino a refrescarnos y a reponer algo de fuerzas para retomar nuestro recorrido, que ahora abandonaba la Vía de la Plata dirección a Hervás, el terreno llano se terminaba y tocaba subir, más de 40km de subidas por carreteras secundarias y poco transitadas, un surtido número de fuentes a lo largo del trayecto fueron prácticamente los únicos motivos que detuvieron nuestra marcha.
El paisaje iba cambiando, las altas montañas cada vez se veían más cerca, aun conservaban en su cumbre las huellas nevadas del invierno, en nuestras piernas más de 70km y la mayoría de subida, pero aun quedaba lo peor; había que abandonar la carretera y comenzar a pisar tierra,piedras y matorrales si queríamos alcanzar la cumbre de la Peña Negra (1600m de altitud). La primera parte de la ascensión aunque con fuertes pendientes resultaba cómoda, llegamos a una fuente con el agua helada y riquísima; kilómetros atrás ya nos habían hablado de ella unos señores que estaban sacando enormes troncos de madera, la cual era arrastrada hasta la orilla de la carretera por una pareja de caballos con una envergadura y un porte exagerado, necesaria para arrastrar aquellos troncos.
Después de rellenar nuestros botelleros y refrescarnos un poco comenzaba el tramo más duro, un estrecho sendero con elevadas pendientes de pasos difíciles y técnicos, que nos conducían a lo alto de la Peña Negra. Aquí terminaba nuestra subida, por fin íbamos a bajar algo después de tantas horas de subida.

Durante la bajada una anécdota surgió y que sin duda recordaremos de forma especial, porque una inesperada sorpresa nos esperaba, al girar una curva nos encontramos con dos chicas que se sorprendieron tanto al vernos como nosotros a ellas; trataré de expresarme con el mayor respeto posible y sin ánimo de ser grosero ni nada por el estilo, eran dos mujeres que competían en belleza con el estupendo paisaje primaveral, e iban exponiendo gran parte de su piel para que fuera bronceada por el generoso sol, sin duda el contexto donde nos hallábamos envueltos fue lo que nos sorprendió, ¿Cómo nos íbamos a imaginar nosotros eso? ¿Cómo iban a esperar ellas, que siendo lunes y a esas horas, fueran a bajar por ahí un grupo de ciclistas?,una anécdota más para nuestro recuerdo, porque a lo largo de la bajada fueron varias las mujeres que nos encontramos subiendo en bikini por aquella pista, no hicimos fotos por respeto pero no hubiera estado mal para corroborar estas palabras.

Después de la liviana y reconfortante bajada llegamos a Candelario, el ecuador de nuestra ruta, muchos kilómetros pero tocaba regresar, luchar contra al momento de después de comer, de las perezosas horas de la siesta, contra al calor sofocante que estaba cayendo... Pero con fuerzas, y con ganas de seguir disfrutando del reto propuesto por nuestro amigo Antonio.
El camino de regreso se prestaba más cómodo, estaba previsto bajar por la antigua carretera hasta Baños de Montemayor, una bajada por carretera donde pudimos disfrutar del placer de dar pocos pedales y avanzar a buen ritmo, en las zonas llanas fuimos rodando agrupados, yo me tuve que esconder a rueda de mis compañeros porque me costaba seguir el intenso ritmo, pero me sentía cómodo y arropado en todo momento, se mostraron generosos y mostraron el compañerismo que reina entre nosotros.

Nuestro cuentakilómetros había superado la barrera de los 100km y estábamos regresando por otro trazado diferente al de ida, pasando por la Granja, por Zarza de Granadilla, para regresar de nuevo por la antigua ciudad romana de Cáparra y volver a retornar sobre nuestros pasos, fue a partir de aquí cuando más flojo me vi, a la altura del km 130, pero paramos y me tomé un gel, que combinado con el PRECIOSO (creo que merece las mayúsculas) sendero, hicieron recobrar mis fuerzas, cualquiera que viera a la velocidad a la que circulábamos no podría imaginar de donde veníamos, porque llegamos de nuevo a Carcaboso con una fuerza increíble, sabiendo que al menos para tres de nosotros,ésta era la etapa más larga que habíamos vivido, no la más dura pese a los 2200 de desnivel acumulados, pero lo que estaba claro es que había sido especial, muy especial.


Pusimos el broche final a la jornada con unas cervecitas con limón y unos suculentos pinchos después de muchas horas de aventura pedaleando sin cesar, y sobre todo con ganas de volver a superar en un futuro estos 150km.

Puedes descargarte los track pinchando aquí

lunes, 28 de mayo de 2012

II Serragatina Épica




Segunda edición de la Serragatina épica, una marcha que organizan nuestro amigos del Club Ciclista de Cilleros y a la cual no había tenido la oportunidad de asistir el año pasado.
Un recorrido de lo más completo,exprimiendo los mejores encantos de este rinconcito rayano de la Sierra de Gata, con una amplia participación de nuestros vecinos portugueses, amantes de las rutas de BTT exigentes.


El plato que nos han servido nuestros amigos cilleranos ha sido de lo más suculento, pudiendo degustar el sabor añejo de la historia, plasmado en las antiguas calzadas romanas, que bajo el majestuoso Castillo de Trevejo luchan contra el transcurrir del tiempo. Todo servido sobre un lujoso mantel; teñido por los muchos colores de la Primavera serragatina, con la mejor guarnición posible, en presencia de diversos Clubes de uno y otro lado de la Raya que no querían perderse este particular evento.



Tengo que resaltar la exquisita organización, con un grupo de colaboradores que han ido llegando puntuales a cada uno de los avituallamientos, donde reponer fuerzas, para continuar una marcha que no daba tregua, que se endurecía en los kilómetros finales, la belleza de la primera parte de la ruta se veía sustituida por un terreno exigente en el último tramo del recorrido y no por ello menos atractivo.

Muy buena jornada de BTT la vivida este día en Cilleros; cuna del buen vino de pitarra y de gente generosa como la gente del Club Ciclista de la Localidad y amigos, que nos atendieron de lujo, con buena comida, un grifo de cerveza al final la ruta, una camiseta conmemorativa, llaveros... pero sin duda a mí me ha echo especial ilusión el "Comic de la Sierra de Gata", por que hace años tenía el primero que editaron, pero con la de veces que he ido cambiando de residencia no sé ni en qué caja estará escondido.

Creo que ha sido una de las rutas donde más fotos he visto al final de la misma, aquí os dejo un enlace del club ciclista de Cilleros para recrear la vista con los paisajes y los encantos de la zona Pincha aquí si quieres ver las fotos de la ruta
Vídeo de la II Serragatina Épica




Una Aventura Jurdana



Último domingo del mes de abril y pese a un invierno seco y falto de lluvias, ésta vez se cumple el refrán de “en Abril aguas mil”.

Lleva dos o tres días lloviendo, el descenso de las temperaturas nos recuerda que el calor y los días soleados de primavera deben esperar. Pero en BTT Xálima teníamos planeado realizar la Ruta de Alfonso XIII en la comarca vecina de las Hurdes y como cualquier domingo del año, nunca hay excusa suficiente para deshacer lo que está acordado.
El sábado por la mañana llego a las Hurdes y no hago más que mirar al cielo, la lluvia era  incesante y a lo largo del día no paró de llover, las montañas que normalmente diviso desde la casa de mis suegros están envueltas en penumbra, tapadas por unas nubes negras que no hacen señales de desaparecer, el pronóstico meteorológico aún asusta más, el telediario muestra el mapa de España cubierto de nubes con agua y tormentas. Enciendo el ordenador para mirar el tiempo por localidades y cotillear el facebook de paso, me encuentro muchas contradicciones que me llaman la atención: Probabilidades de lluvia 100% y Rubén BTT añadiendo nuevos trazados a la ruta programada.

Me asomo a la ventana, ya ha anochecido y la lluvia aprieta con fuerzas, estaba seguro según lo que había visto que Rubén y Alberto bajarían de Salamanca, al igual que confiaba que Miguel “Hurdano “tampoco faltaría a la cita, pero quería saber cuántos compañeros más vendrían al día siguiente para preparar en casa comida al finalizar la ruta, porque todo apuntaba a que se haría dura. Llamo a Antonio BTT para ver cómo está el tiempo por allí y ver sus planes; me dice que en Montehermoso está diluviando pero sus palabras me dejan ver que no hay motivos para suspender la ruta, no me sorprende verle animado ya nos conocemos.

Acto seguido llamo a Serra a ver cuántos vendrán de Moraleja, son las 23horas pasadas y me dice el colega que va montado en la bici, con una mano conduciendo, con la otra lleva el paraguas y entre el hombro y la oreja el teléfono, ahí está preparándose para mañana, me dice que ha quedado con Miguel y que no sabe si se presentará alguien más…
A Rubén no hace falta llamarlo, él sigue añadiendo trazados de colores en el mapa de la ruta prevista, es incombustible.
Me fui a acostar con la certeza de que al día siguiente íbamos a vivir una buena aventura de BTT. Durante la noche la lluvia no paró, pero a la mañana siguiente yendo de Vegas de Coria a Nuñomoral, que era dónde habíamos quedado, no calló una gota de lluvia; un halo de esperanza recorrió mi mente durante unos minutos llegué a pensar que el cielo daría un respiro pero fue en vano.

 
Al llegar a Nuñomoral me encontré con Antonio, ya había bajado la bici del coche y se refugiaba de la lluvia bajo un minúsculo balcón, bajo mi bici y me pongo a su lado, después de los saludos lo primero que comentamos es que tendríamos que hacer lo que estaba previsto y dejarnos en paz de los nuevos trazados de Rubén, “Ahora cuando llegue se lo decimos…” , a los pocos minutos llegan Miguel y Serra, saludos correspondientes y vuelve a salir el tema de los añadidos de Rubén a la ruta: “Muchos colores ha marcado en el mapa”…,”yo creo que Rubén no sabe dónde nos vamos a meter” ,etc.
Por fin llega el “Maestro Rutero” y Biciman Madruga, que ésta vez no hizo honor a su apellido y no madrugó suficiente. Preparamos todos nuestros enseres, nos retrasamos un poco entre ajustes y más justes, pero allí estábamos los seis y nuestra amiga la lluvia desde primera hora. Foto de rigor y comenzamos nuestra particular aventura.
Los primeros kilómetros transcurren por una pista forestal ancha con una subida prolongada para entrar en calor, no dejamos de subir durante muchos minutos pero la temperatura era buena y las lluvia nos dio un pequeño respiro, nos paramos a quitarnos los chubasqueros y comer algo, después seguimos subiendo y subiendo mientras charlábamos sobre un tema interesante de cómo trazar senderos en bosques salvajes (Los que estábamos allí seguro que esbozaremos una sonrisa al leer esto). No tardamos mucho en volver a enfundarnos el chubasquero para no deshacernos de él en toda la mañana.

Tras unos kilómetros de subida llegamos a un mirador desde el que poco se divisaba, las nubes estaban agarradas a la tierra, aunque estando allí fueron un poco generosas y nos dejaron ver algo del encanto de la zona donde estábamos inmersos, rápidamente recobramos nuestro recorrido por que nos quedábamos fríos, la lluvia no era muy intensa pero tampoco desaparecía del todo.
En éste punto del recorrido es cuando empezó la verdadera esencia del día, tomamos la Senda de Alfonso XIII descendiendo hasta el Robledo y Casares de las Hurdes, una auténtica joya natural de sendero ,que muestra la lucha entre el hombre y la tierra de ésta comarca  hurdana, lucha por convivir en armonía, por buscar beneficio mutuo, aunque en ésta zona con medios ancestrales y poco avanzados, pocas modificaciones se pueden hacer en un terreno bravío y harto complicado, el hombre en las Hurdes ha tenido que luchar contra el desnivel del terreno construyendo bancales donde poder plantar algo para llevarse a la boca, y lo ha tenido que realizar con sus propios medios, sin máquinas, a golpe de sudor y de esfuerzo, con constancia y por necesidad ,en una época anterior donde la palabra crisis no se conocía.

Hoy las cosas han cambiado y el paisaje sigue marcado por el trazo que dibujó el hurdano sobre su tierra, conservando una belleza incomparable, donde la mejor manera de apreciarla es sumergiéndote dentro, tan dentro como estaban nuestras bicicletas en ese momento, descendiendo por el estrecho sendero de pizarras resbaladizas que amenazaban con lanzarlos hacia el precipicio, con filos cortantes para nuestros neumáticos, con un zigzagueante recorrido no apto para principiantes, donde tuvimos que exprimir nuestra técnica adquirida a lo largo de los años ;aunque agua y terreno jugaran en nuestra contra, pero el paisaje merecía la pena, la euforia recorría nuestras venas y no íbamos a dejar que la meteorología fastidiara nuestro día.

En las fotografías subidas por Rubén y Antonio se puede apreciar la dureza en los rostros de los allí presentes, hemos tenido que apretar los dientes, que poner pié a tierra en algún que otro tramo, que sufrir un poquito, pero sobre todo; hemos recargado nuestro  particular almacén de autoestima y de satisfacción propia.
El tiempo pasaba rápido y seguíamos luchando por los angostos senderos en pleno corazón hurdano que palpitaba a la vez que el nuestro, habíamos quedado para comer dentro de un par de horas, estábamos calados hasta los dientes y llegábamos a los “trazados de colorines” de Rubén… ¿Cómo actuábamos?, ¿Hacíamos caso a la cordura o desafiábamos al “Maestro rutero”?, sus pensamientos estaban centrados en llegar al chorro de la Miancera por primera vez, nunca había estado y ¿Qué mejor momento para visitarlo? Agua no iba a faltar. Alguno que otro proponía dejarlo para otra ocasión, pero yo sabía que era por el compromiso adquirido con mis suegros pero  todos compartíamos el mismo deseo, se apreciaba en sus caras tan claro como el agua que les resbalaba.


 Las historias inacabadas no son para nuestro grupo y yo tampoco quería que ésta aventura acabara, estaba disfrutando como pocas veces, me sentía fuerte, apasionado, llevaba mucho tiempo esperando pedalear con mis compañeros por ésta comarca que me atrae como pocas, quien se enamora de una “Jurdana de pura cepa”, como fue mi caso, se enamora también de su tierra y de sus costumbres. Así que hablo con Rubén a escondidas y decidimos seguir el track previsto, no podía ser menos, al igual que en otras rutas exigentes realizadas por el grupo como la Gaturdana , se siguió palmo a palmo el recorrido marcado, aquí había que hacer lo mismo. Algunos de los que estábamos en ésta ruta no estuvimos en la Gaturdana y algunos de los que estuvieron en aquella ruta o en otras “Panaeras” no estaban aquí presentes, pero el éxito de la convivencia y el buen ambiente de BTT Xálima se centra en el grupo y como grupo somos la Leche.

Nos desviamos siguiendo el GPS por un olivar abandonado, alguna vez dudé que aquel camino de cabras tuviera salida a la civilización, pero la tecnología en este tipo de rutas cubre un importante papel. Atravesar tanta maleza suele acarrear malas consecuencias y ésta vez la mala suerte se cebó con la bici de Alberto, una rama se atravesó y le dejo el cambio trasero hecho un “ocho”, la única manera de solucionarlo era cortar la cadena y dejar solo un plato y un piñón funcionando, y como es de suponer el terreno por el que íbamos requería mucho juego de marchas.
Hay que agradecer la generosidad de Alberto que nos impulsó a que siguiéramos hacia el Chorro del Gasco, que él haría el apaño oportuno a su máquina y saldría a la carretera dirección Nuñomoral, por suerte el pueblo no estaba muy lejos y por eso decidimos continuar sin él, por primera vez dejábamos a un compañero sólo en mitad del bosque.
Entonces ya nuestro propósito firme consistía en llegar al Chorro del Gasco cuanto antes , había que buscar la manera de ganar tiempo, tuvimos que recurrir a la carretera como vía rápida, aunque Rubén seguía mirando a los senderos y explicándonos en todo momento por dónde iban, decidido éste hombre en otra época anterior debió ser un “Macho cabrío”, pero tuvimos que ignorarle ésta vez.


Fue entonces cuando comenzó a llover como si nunca lo hubiera hecho, como si tiraran agua por un botijo, y nosotros allí sin dar marcha atrás, sin pensar en retroceder  los pocos kilómetros que nos separaban del coche y dar por finalizada la ruta. Había que llegar al Gasco, al chorro de la Miancera y por supuesto, sacar la foto para el recuerdo. A medida que atravesábamos las pequeñas alquerías de fragosa o Martilandrán la gente nos miraba extrañada, como si estuviéramos locos y sin duda algo de razón llevaban con la que estaba cayendo.
Al llegar al Gasco descendimos por unas escaleras y nos dispusimos a seguir el bello sendero que conducía a nuestra ansiada meta, no sin antes luchar con las rocas mojadas, las adversidades del terreno y la lluvia intensa. Recuerdo que llevábamos los labios salados por el sudor que escurría de nuestras cabezas, todos llevábamos esa sensación, se notaba como escurría el sudor caliente por la cara helada, el último tramo se antojaba imposible para seguir con las bicis cargadas a cuestas, optamos por dejarlas allí y terminar a pié, e incluso a pié se hizo costoso, parecía que estábamos perdidos en el culo del mundo y se avecinaba el diluvio universal.

Al final y aunque parezca un tópico el esfuerzo obtuvo su recompensa, la cascada de agua se presentó ante nuestros ojos majestuosa, rebosante, nos sentíamos enanos ante tanta grandeza, éramos minúsculos ante el Chorro del Gasco, el sonido del agua era espectacular y nuestras caras no podían expresar mejor la alegría, en concreto la de Rubén, era todo un poema.
En estos momentos es cuando valoras de verdad a los compañeros que tienes, a los que están y a los que no han podido compartir ésta aventura  por diferentes razones, pero que forman parte de BTT Xálima y que sin duda ayudarán a alcanzar otras metas cuando alguno de los que estuvimos aquí faltemos.
El momento en el Chorro fue mágico, regresamos de nuevo al sendero borrachos de satisfacción, de alegría, con las endorfinas rebosantes y la boca salada, aunque el recuerdo de éste día siempre será de lo más dulce.








Vídeo de la Ruta:

Reconquistando la Vía de Dalmacia


  La cita comienza en el puente Romano de Coria, con la catedral mirándonos desde lo alto, en su retina seguro que guarda los recuerdos de una época anterior, milenaria, donde las vías antiguas de comunicación que enlazaban los municipios y provincias eran muy transitadas, y con el itinerario bien marcado y definido.
Hoy en día aventurarse a realizar estos trayectos como la antigua vía de Dalmacia, es todo un ejercicio de orientación, salto de vayas, imaginación y por supuesto un buen estado de forma.

Comenzamos con la foto de rigor posando con nuestras bicis a la salida, junto al puente romano de Coria y nos disponemos a subir por los cuestos de Mínguez, con algunas rampas de hasta el 12%, no está mal para entrar en calor. Rubén lleva su GPS repleto de datos, ha realizado una árdua tarea, ya que hay poca información cartográfica sobre esta vía, a recopilado tramos de algun que otro biker y lo demás ha sido creación propia, tengo que decir que si no llega a ser por él y su trabajo cartográfico no sé ni donde hubiéramos llegado..
Pasando Mínguez, continuamos por una dehesa dirección al embalse de portaje y desde allí a buscar el tramo que cruza la carretera de Portezuelo a Acehuche.

Es a partir de aquí cuando comienza la verdadera aventura, donde hay hectáreas y hectáreas de terreno, por donde no transita nadie más que animales salvajes y toros bravos. Pocas veces he sentido temblar mis piernas de esa manera, hemos pedaleado entre manadas de toros bravos de una famosa ganadería y entre las madres que los parieron; nunca nos encontramos un cartel de "peligro ganado bravo"," prohibido pasar" ni nada parecido.
Cuando están todos juntos en el campo huyen de nosotros, pero mi temor en todo momento era encontrarme con alguno rezagado o fuera de su grupo, hemos empleado su misma extrategia procurando permanecer todos juntos también en todo momento, con la única diferencia que nosotros éramos seis y ellos "cienes y cienes".



Yo veía toros y vacas por todos los lados, las pulsaciones a mil, no había senderos, ni árboles donde refugiarnos, el terreno escarpado y agreste, la cañada Real Soriana que marca el GPS ha quedado enterrada con el paso de los años, una odisea en medio de la nada, una tensión constante, sabemos que estamos cerca de nuestro destino pero la dificultad, la duda, el cansancio, la ausencia de senderos..., nos obligan a seguir los track del GPS campo a través, con muchos desniveles, pero con unos compañeros de lujo que no pierden la sonrisa, que no se rinden y se crecen en las adversidades, sabemos que llegaremos tarde o temprano a Alconétar y hay que mantener la calma. Además allí nos esperan Mª Luisa, Úrsula y Mabel con comida.

Tras un par de horas intensas entre toros, ciervos, zorros, aventuras y desventuras llegamos a un camino de esos que te hacen respirar, que huele a transitable, que indica que lo peor ya ha pasado y que en pocos minutos estaremos en nuestro destino; así nos presentamos en el puente de alconétar donde nuestras queridas compañeras nos tenían preparada para nuestra sorpresa una mesa llena de alimentos: Chorizo, lomo, queso,empanada casera,patatera, vino, refrescos,café, colacao, dulces..., e incluso un chupito de vozca-caramelo para hacer un brindis, ¿ Qué mejor recibimiento después de tanto esfuerzo?...

Esta ruta no creo que la olvide fácilmente, ha sido una expedición en toda regla, sin duda hemos vuelto a reconquistar la Vía de Dalmacia 2000 años después, todo no ha salido como esperábamos, pero estamos más que satisfechos de esta aventura. Ya queda menos para realizar la Vía de Dalmacia desde este punto de Alconétar a Salamanca.

BTT Xálima y su compromiso con la historia sigue vivo.

Puedes ver el vídeo pinchando aquí: http://www.youtube.com/watch?v=pHa0e3-6exw

San Blas 2012.Serradilla del Arroyo



Domingo 5 de Febrero


El pasado domingo acudimos hasta Serradilla del Arroyo (Salamanca) un grupito de unos doce miembros de BTT Xálima, nuestros "amiguetes" del Club MTB La Hastiala tenían preparada una ruta de 43km por zonas de pistas, senderos cargados de encanto y también, algún tramo por carretera como la bajada a Monsagro, donde poder apurar nuestras máquinas y gozar de una bajada de vértigo detrás de la Guardia Civil.( que no delante, que eso es peor...)


El frío de esa comarca Charra no fue impedimento para nuestro disfrute, un calentamiento en el parque geriátrico de Serradilla del Arroyo y el comienzo en rampa, fueron el bálsamo suficiente para activar nuestro mecanismo y disponernos a realizar la marcha.
Agrupados como pocas veces, con un ritmo alegre y constante llegamos a la mitad del trayecto, al generoso avituallamiento que ofrecen los colegas de La Hastiala: choricito, tortilla de patatas, empanadas caseras, dulces, zumos, refrescos, chocolate, fruta...y más. Todo un manjar en mitad del campo, aunque sin duda hay que destacar por su efecto reconfortante y recuperador el caldito caliente.

Después de este "avituallamiento-Romería" costó arrancar de nuevo, ésta zona es muy fría; aunque no hay nieve y se ve menos hielo que otros años anteriores. Una segunda parte de la ruta por un sendero estrecho que atrapaba por belleza hasta al más insensible, y alguna que otra rampa llevadera por pistas, nos condujeron de nuevo al punto de salida.

La comida en el Bar amenizada por el ambiente "Jalamero" fue sin duda para mí, la mejor manera de poner fin a una semana y empezar con ganas la próxima.


Puedes ver un pequeño vídeo de la jornada pinchando en el siguiente enlace:http://www.youtube.com/watch?v=Q5RfFPFP6ZA

I Ruta Invernal BTT Xálima

Sábado21 de enero, 21 horas:

A la Villa de Gata comienzan a llegar seres extraños que se van reuniendo cerca de la fuente de la plaza, lucen atuendos reflectantes, se desplazan sobre dos ruedas a lomos de sus bicicletas tuneadas, con una iluminación que no pasa desapercibida ante los ojos de lugareños y viandantes. Algo sucede en Gata, un halo de curiosidad y misterio se palpa en el ambiente.
Dicen que son del grupo de BTT Xálima , ¿se habrán confundido de hora?, ¿ de día?, ¿ de lugar?... es de noche, es invierno y además no hay luna, supuestamente éstas características no sean las más adecuadas para la práctica de este deporte , pero aquí están, ya los conocemos y todo apunta a que aquí comienza una de sus nuevas aventuras.
Objetivo: llegar al convento del Hoyo y adentrarse en sus ruinas para comprobar "In Situ", si es verdad el rumor de "La Niña del Convento".


Una bonita historia con un broche de gala al final de la ruta, una deliciosa cena en el bar "Los Portales" de Gata para compartir las mejores jugadas de la ruta, rodeado de algo que nos gusta tanto como montar en bici (Zampar), reponer lo gastado y reírnos hasta de nuestra propia sombra.

Hasta la próxima!!!

Puedes ver el vídeo pinchando en el siguiente enlace:

Comienza la Aventura.

Después de haber intentado alguna que otra vez crear un Blog y haber colaborado en otros, me dispongo cargado de ilusión y entusiasmo a rellenar de historias y vivencias este espacio.

Todonterreno nace por una necesidad personal, con la intención de recopilar las memorias de una vida que se esfuma con rapidez, el pretexto de este blog es captar la esencia del día a día, de esos momentos que pasan sin saber si volverán,por eso creo en la necesidad de atraparlos y buscarles cobijo en este pequeño rinconcito abierto al mundo.

Me encanta escribir, me relaja y me llena de paz interior donde evadirme y esconderme ,aunque sea por unos instantes, de las cosas negativas que nos acechan. Pero si hay de algo que realmente me guste escribir es sobre mis vivencias en Bicicleta, un artilugio simple y sencillo capaz de trasladarme al mundo de los sueños, de los retos, de la superación y del disfrute pleno.

Comienza aquí esta aventura para compartirla con todas aquellas personas que deseen acompañarme y quieran participan conmigo en mantener vivo este espacio.

Saludos.